sábado, 24 de enero de 2009

Frío


Te has arrinconado en un oscuro soportal rodeado de cartones. Los cajeros están cada vez más llenos de gente y vacíos de dinero. Tienes miedo. No hace tanto tiempo que podías mirar por encima del hombro a los que se recostaban asomando una mano tímida, entre una expresión de pena, que no por estar ensayada, era menos verdadera. El frío te encoge, te hace parecer más pequeño, como si quisieras desparecer, dejar de ser parte de un mobiliario urbano molesto, al que hay que evitar, esconder de la mirada. Duele, sobre todo el orgullo; pero, poco a poco la rutina humillante segrega resignación y olvido. Hace tiempo que no recibes una caricia, que eres anónimo, nadie te mira a los ojos, sólo tu voz te habla, eres apenas estadística que crece. Recitan problemas y números, pero tú sólo sabes de días grises, de noches oscuras y duras, sin lunes ni sábados. Ya apenas hay rabia, pocas lágrimas, mirada cada vez más vacía. Ellos le dicen crisis, tú lo llamas frío.

lunes, 19 de enero de 2009

A la compar babucha




Un canto a ti, mi sincero homenaje
en zapatería expuesta sin detalle
de escaparates olvidada, un ultraje
en vulgos expositores al frío de la calle.


Como prenda prosaica os acusan
aquellos que tiranizan nuestros pies,
de la tortura hacen negocio y abusan
belleza con dolor, el mundo al revés.


Oh vosotras, tan cálidas y acogedoras
descanso del ardiente pinrel guerrero
refugio del caminante, salvadoras
del pie tiranizado por el chapinero


Auxilio del adolorido pie femenino,
sometido al terrible tacón de aguja,
cual inquistorial castigo para brujas
atormenta con instinto de asesino.


Alivio de callos, planos pies o cabos
inseparable del pijama de franela
en días de braseros, cisco y candela
aunque alguno de ti haga menoscabo.


Remedia la vuelta del Domingo de Ramos
abrigo tras baño en balsámica palangana
al regresar a casa sin fuerzas ni ganas
tras cruel estreno por no perder las manos


Dulce prenda desde ayer hasta hogaño
tan entrañable enfundarnos en tu tacto
y ahora al diseño te someten sin recato
yo rompo una lanza por el vulgar paño

Venerable nido a cuadros fragmentado
enmarcan discretos grises y marrones
suela amarilla, a prueba de rocetones
mejor fin de nuestros días atribulados


Pariente pobre de la estival chancleta
exhibidora de los dedos y del sudor
mientras tú, prenda del recato y el pudor
al dictado de la moda no mudes de chaqueta


Recuerdo de los mejores días, escucha,
del ayer pantufla, sarracena alpargata,
popular zapatilla, entre todos destaca
tu nombre, el más rancio, oh tú, babucha.

viernes, 16 de enero de 2009

Tierra Santa


Tierra Santa sin tiempo de paz. Tierra Santa desangrada. Tierra de Dios, para odiosas guerras de religión. Pueblos elegidos, pueblos que rezan, pueblos que se combaten con la seguridad de la salvación eterna. Tierras de Historia, demasiada historia para tan poco territorio. Cruce de "civilizaciones", donde lo civil es un escudo humano en el que se parapetan los canallas. Muro de las lamentaciones y las separaciones, lapidaciones, bombas inteligente, fósforo blanco que trae la muerte más negra. Derecho escrito torcido; designio divino, de signo endiablado. Estrella que guía las armas de la muerte, media luna que dibuja una sonrisa macabra. Democracia, burocracia, plutocracia, puta gracia. Génesis, Éxodo, Apocalipsis. Franja que adelgaza conforme aumenta la ignominia. Oriente Próximo, desorientado y desunido. Geopolítica genocida, diplomacia cínica, fanatismo apagado con petróleo, derecho esgrimido como espada. Para acabar con el terrorismo, ¿aplicamos el mismo terror? Razón de estado, estado sin razón, sin razones no hay estado. Almas que se salvan por las armas. Odio eterno, tiempo que comprenden los dioses. Mossad, Hamas, ¿jamás la paz?

miércoles, 14 de enero de 2009

A modo de presentación


Por qué otro blog. Para qué escribir.


Porque sí. Porque desde hace un par de años estuvo ahí la idea, pero nunca quise dedicarle mucho tiempo. Porque, usuario habitual de otros blogs o bitácoras o como se les quiera llamar, también quería expresarme con mi voz. Porque hay muchas cosas que decir. Por vanidad o aburrimiento. Porque hay preocupaciones, devociones y pasiones. Por compartir.


¿Y de qué va a ir éste?


Pues, como su propio nombre indica, un poquito de todo, de lo que me apetezca en un momento dado, de lo que surja, si tiene alguien a bien leer. De la rabiosa actualidad, nunca mejor adjetivo para describirla. El nombre proviene de una magnífica anécdota que me contó en su día mi gran amigo Álvaro Pastor, sobre ese personaje de frases lapidarias y apetito voraz que fue el Pali. Sí, el mismo que quiso plantar el Prado de papas para comérselas todas aliñás, el de las cigarreras por la calle S. Fernando, que se murió antes de ver surcar de nuevo el tranvía por allí. Relataba Álvaro que hace unos años, junto a unos amigos, tenía una tertulia sevillana, que celebraban en famosa taberna de la collación de San Lorenzo, donde, de vez en cuando, invitaban a algún célebre sevillano parta charlar sobre las pasiones que más conmovían a ese grupo de jóvenes. Después de varios invitados, decidieron que acudiera a la cita el reconocido trovador Paco Palacios, el Pali, que, protegido tras sus imponentes lentes de culo de botella, iba a ser obsequiado con un aperitivo en dicha taberna. En la mesa, rodeado de jóvenes sevillanos, descansaba su imponente figura, a la espera de que el camarero le cantara la lista de las tapas. Así se hizo, y cuando el camarero acabó, el Pali, con su profunda voz, le espetó: "Niño, pon de tó". Acabose la colación y fue la ruina de la tertulia.